Preguntas Frecuentes

En esta sección te ayudaremos a aclarar algunas dudas que pueden surgir al momento de practicar estos regímenes de alimentación cetogénica y el ayuno intermitente.

Alimentación Cetogénica

Es una dieta baja en carbohidratos para provocar el efecto de cetosis. Para lograr esto, también es rica en grasas, y un consumo moderado de proteínas.
Un régimen cetogénico es una forma ligeramente más extrema de dietas bajas en carbohidratos. Mientras que hasta 150 gramos de carbohidratos por día pueden considerarse bajos en carbohidratos, entrar en un estado de cetosis generalmente requiere reducir los carbohidratos a un nivel de menos de 50 gramos por día. Al igual que también es mucho más alta en grasas y baja en proteínas.
Es un proceso natural que le permite a tu cuerpo seguir trabajando no hay presencia de carbohidratos. En este caso el hígado convierte la grasa corporal en cetonas que se liberan en el torrente sanguíneo, siendo este es un gran combustible para tu cerebro.
Varía, desde unas horas a 1-2 días, hasta una semana o más. Las personas con mayor resistencia a la insulina (por ejemplo, las personas con diabetes tipo 2) generalmente tardan más, mientras que las personas jóvenes y delgadas generalmente entran en cetosis mucho más rápido.
Hay algunas maneras en que se puede realizar dependiendo principalmente de tu presupuesto. Las tiras de cetonas en orina son las más fáciles de encontrar y son relativamente baratas, lo que le permite realizar pruebas con más frecuencia. Sin embargo, solo le da una estimación del rango de sus niveles de cetonas. Otra opción son ciertos medidores de glucosa en la sangre que han sido adaptados específicamente para detectar cetonas, y son el método más preciso para medirlas, pero el costo de las tiras reactivas es relativamente costoso si tiene la intención de analizar sus cetonas regularmente.
Generalmente por encima de 0.5 mmol/l. - Cetosis Baja: 0.5 mmol/L – 0.8 mmol/L - Cetosis Media: 0.9 mmol/L – 1.4 mmol/L - Cetosis Alta o Intensa (Ideal para la périda de peso): 1.5 mmol/L – 3.0 mmol/L
Para fines de comparación, es bueno medir aproximadamente a la misma hora todos los días. Medir por la mañana antes de comer hace que sea más fácil comparar el resultado día a día. Sin embargo, los números de la mañana generalmente se encuentran entre los más bajos del día, mientras que los números de la tarde son más altos. Es importante tener en cuenta que los niveles de cetonas no distinguen entre la quema de grasa dietética y la grasa almacenada.
Generalmente es muy segura, sin embargo, siempre debes consultar a tu médico de confianza antes de comenzarla. Hay algunos casos en que si debes tener mayor preparación y asistencia médica tales como diabetes, presión arterial alta, períodos de embarazo y lactancia.
Los tres principales grupos de grasas que comemos son grasas saturadas, grasas poliinsaturadas y grasas monoinsaturadas. El consenso general solía ser que las grasas saturadas eran terribles para nosotros y que había un vínculo claro entre las grasas saturadas y enfermedades cardíacas. Sin embargo, en los últimos años, las grasas saturadas han demostrado que no solo NO causan ataques cardíacos, sino que también mejoran los niveles de colesterol. Puedes comerlos sin preocupaciones. Las grasas poliinsaturadas son un poco más difíciles. Las grasas poliinsaturadas procesadas (como la margarina para untar y los aceites vegetales) son terribles para nosotros, y generalmente incluyen grasas trans. Sin embargo, hay grasas poliinsaturadas presentes en la naturaleza en alimentos como el pescado, que son excelentes para nosotros y mejorarán el colesterol. Por último, hay grasas monoinsaturadas. Estos son bastante conocidos por ser "saludables" y generalmente se aceptan como tal. El aceite de oliva es un ejemplo piramidal de algo que es más proporcionalmente una grasa monoinsaturada.
Aunque la principal aplicación es la perdida de peso, las proporciones de macronutrientes pueden ser adaptadas para mantener o inclusive ganar peso.
El tiempo dependerá de muchos factores incluyendo tu propia genética, pero se recomienda al menos permanecer de unas 8 a 12 semanas para que el cuerpo logre adaptarse.
Generalmente se compone de 70-75% de grasas, 20-25% de proteínas, y 5-10% de carbohidratos
El número exacto de gramos de carbohidratos será diferente para todos, pero generalmente es de alrededor de 20 a 50 gramos por día.
Muchas personas cuentan los “carbohidratos netos”, que son los gramos de carbohidratos totales menos los gramos de fibra y los azucares de alcohol. La fibra no se cuenta ya que no se digiere.

Ayuno Intermitente

Realmente no: el ayuno intermitente es un protocolo de alimentación, pero no nos dice qué alimentos debemos priorizar o de cuáles podemos prescindir, como sí pueden hacerlo algunas dietas.⁣ Nos indica que existe un período de tiempo en el que tenemos que mantenernos en ayuno (sin ingerir alimentos con calorías, pero sí podemos ingerir otros como agua, café o té verde) y otro período de tiempo en el que debemos meter nuestras comidas. Estos períodos pueden variar en función del tipo de ayuno intermitente que sigamos.⁣
La autofagia es un mecanismo natural de regeneración que ocurre en nuestro cuerpo a nivel celular. Reduce la probabilidad de contraer ciertas enfermedades y prolonga la esperanza de vida.
Cuando practicas el protocolo de Ayuno Intermitente tu cuerpo estará sensible a cualquier alimento que ingieras, por esa razón debes escoger muy bien lo que consumas para evitar salir de este estado. Esta es una lista de alimentos que garantizarán que no rompas tu ayuno y a su vez te brindarán algunos beneficios: Agua, Café Negro, Te Verde, Vinagre de Sidra de Manzana.
Aumento en la secreción de la hormona del crecimiento, aumenta la energía en el cuerpo, mejora la memoria y aumenta la función cerebral, se promueve la reparación celular y la autofagia, reduce la resistencia a la insulina, ayuda a regular los niveles de colesterol.
El ayuno intermitente no es para todos. Las personas que no deben realizarlo o que deben buscar el consejo de un profesional certificado antes de hacerlo son: adultos mayores de 65 años y niños menores de 18 años, presencia de algún un trastorno alimenticio, tener muy bajo peso, durante el embarazado o en periodo de lactancia, problemas cardíacos o diabetes tipo 1, migrañas incontroladas.
1. Combinación de ayuno intermitente con dieta cetogénica. 2. Ayuno intermitente con una dieta baja en carbohidratos. 3. OMAD (One meal a day) o Una Comida al Día.
Al levantarte tus niveles de glucosa e insulina son muy bajos, esto es buen inicio ya que cuando se encuentran en niveles altos no quemas efectivamente la grasa. Al no tener disponible este excedente, se usa tu grasa corporal de manera más rápida para poder realizar el ejercicio cardiovascular, si mantienes un nivel medio de intensidad no vas a desgastar el músculo.
• Te recomendamos que mantengas un régimen de alimentación bajo en carbohidratos o que combines el ayuno con una dieta cetogénica. • Mientras más largo sea tu ayuno el cuerpo estará más sensible a generar picos de insulina al momento en que hagas tu primera comida, por lo que recomendamos que la misma tenga una baja carga calórica. • El ayuno intermitente puede provocar alteraciones hormonales en las mujeres, por lo que recomendamos que no ayunes todos los días (recomendamos 2 a 4 veces por semana), y que cuando lo hagas que nunca sea por más de 16 horas. En el caso de los hombres sí se pueden realizar ayunos más extendidos de hasta 18 a 20 horas. • No es bueno mantener este régimen por largos periodos de tiempo, ya que esto puede traer problemas a nivel del metabolismo y de la glándula tiroides. Es recomendable que cada 2-3 meses te des unas 2 a 4 semanas de descanso. • Es posible presentar deficiencias de algunos minerales básicos que son esenciales para el buen funcionamiento del organismo, por eso te recomendamos a través de alimentos o con suplementos ingieras los siguientes: sodio, potasio, magnesio, zinc y vitamina D, entre otros.
También conocido como “ayuno de agua”, ya que no ingieres alimentos, sino que te mantienes tomando únicamente agua. No hay un tiempo fijo de por cuanto lo puedes extender, pero se sugiere generalmente entre 24 a 72 horas, y puedes practicarlo al menos 1 o 2 veces al mes. Trae muchos beneficios para la salud y bienestar del cuerpo, en especial porque fomenta la autofagia (mecanismo natural de regeneración celular), creación de nuevos anticuerpos, e igualmente se obtendrá una importante pérdida de peso.
No es técnicamente no es un ayuno, pero es muy bueno para tu sistema digestivo, puedes practicarlo durante 1 día (inclusive combinado con ayuno intermitente), 1 o 2 veces por semana, pudiendo consumir agua, café, té, pero lo más recomendado es que consumas caldos, en especial si es caldo de huesos, ya que el mismo contiene gelatina y glicina, que traen muchos beneficios para proteger y cuidar la mucosa de tu sistema digestivo, disminuyen la inflamación y la existencia de bacterias malignas. Esto te ayudará a mejorar la digestión de los alimentos que consumas el resto de los días.
Este es un ayuno extremo, que debes practicar con mucha cautela, se recomienda hacerlo únicamente 1 vez cada 3 a 6 meses, y consiste en no consumir absolutamente ningún alimento o bebida durante un período de 24 horas, inclusive recomiendan que ni siquiera tengas contacto con el agua, así sea para bañarte o lavarte los dientes. Pero está comprobado que 1 día de ayuno seco es igual a 3 días consecutivos de un ayuno prolongado, y la razón es que cuando privas a tu cuerpo de agua, entonces las células deben obtener agua de otras células más débiles.
Aunque no es técnicamente un ayuno, es una técnica utilizada por personas que desean lograr una rápida pérdida de peso, elevando los niveles sanguíneos de cetonas y empujando a tu cuerpo hacia la cetosis, imitando los efectos biológicos del ayuno. Puede ser útil para romper las mesetas de pérdida de peso, volver a la cetosis después de un día de cheat-meal o perder algunos kilos rápidamente, sin hambre ni antojos. Esta dieta muy restrictiva por lo que se recomienda hacerla de 2 a 4 días, durante los cuales se debe comer entre 1000 y 1200 calorías, de donde el 80-90% deben venir de las grasas.